Con la llegada del invierno y las bajas temperaturas, aumenta el riesgo de contraer enfermedades respiratorias, especialmente en personas alérgicas. La vacunación contra la influenza y COVID-19 se vuelve fundamental en esta época para prevenir complicaciones. El cambio brusco de temperatura puede favorecer la aparición de estas enfermedades, por lo que es importante tomar medidas de prevención.
Los más vulnerables a las bajas temperaturas son los niños, niñas y las personas mayores, quienes necesitan un abrigo adicional para mantener la temperatura corporal. Se recomienda acudir a la consulta médica en caso de presentar síntomas de enfermedades respiratorias y postergar las actividades fuera de la casa hasta recuperarse. Además, es importante abrigarse bien antes de salir a la calle y utilizar gorro, bufanda y guantes para protegerse del frío.
La vacunación contra la influenza y COVID-19 también es una barrera importante contra las infecciones respiratorias. Durante la campaña de vacunación de invierno 2024, que se extenderá hasta el 21 de julio, es fundamental que los grupos prioritarios y la población en general reciban las dosis disponibles. Vacunarse es una medida clave para proteger la salud individual y colectiva, y las vacunas pueden ser aplicadas simultáneamente, siendo seguras y efectivas.